La ubicación es bastante buena y la habitación era genial.

Los arañas no se presentaron en mi lista de invitados.

Un desayuno para recordar

El desayuno buffet era abundante y delicioso, con opciones frescas y la atención del personal hacía que cada mañana fuera especial.

Sin embargo, la atención al cliente dejó mucho que desear. la respuesta a nuestros correos fue lenta y había algunos detalles de limpieza que no se atendieron.

Además de su hermosa atmósfera, el servicio de limpieza fue bastante efectivo y la calidad del desayuno fue impresionante, con especialidades locales que enriquecieron nuestra experiencia. La ubicación también era increíble, perfecta para explorar la ciudad.

Sin embargo, la conexión Wi-Fi tenía algunas interrupciones, lo que resultó un poco frustrante al intentar trabajar desde la habitación.

La estancia fue muy buena, especialmente por la amplitud de la habitación que nos dio espacio para que los niños jugaran. Además, la ubicación permite explorar fácilmente lugares como el Palacio de la Cultura y las Ciencias, que está a un paso. A los niños les encantó la variedad del desayuno. había tantas opciones que todos encontramos algo que nos gustara.

Disfruté muchísimo de mi estancia con amigos. El hotel tiene una ubicación increíble, ideal para visitar lugares como Żelazowa Wola, donde nació Chopin, y la variedad de opciones para desayunar. Además, pudimos rentar una consola PS3 para jugar un rato. La amabilidad del personal hizo que todo fuera aún mejor. Sin duda, repetiría esta experiencia.

Sin embargo, notamos que el wi-fi era un poco inestable en ocasiones, lo cual fue un inconveniente para ponernos al día con algunas cosas.

definitivamente volvería

Me alojé por 3 noches en una suite enorme, con aire acondicionado y un minibar bien surtido. El spa fue increíble, me relajé mucho con sus tratamientos. El desayuno era un festín, con una gran variedad de quesos y panes. La atención de los conserjes fue impecable y siempre listos para ayudarme.

Increíble, increíble, increíble.

Pasé una estancia maravillosa en esta suite que era un verdadero refugio. La comida era un festín, especialmente esos huevos benedictinos, ¡los mejores que he probado! Además, el spa fue increíble con tratamientos que me dejaron como nueva, y la ubicación te permite explorar la ciudad a pie, ¡un verdadero placer!

Recomendado 💖💖

la habitación era amplia y cómoda, pero el wi-fi era muy inestable.

El hotel tiene un estilo clásico y un ambiente acogedor. La habitación era amplia con vistas al parque, lo que hacía la estancia muy agradable. Sin embargo, se escuchaban ruidos de la habitación contigua, lo que afectó un poco la tranquilidad de la experiencia.

Una experiencia histórica con un toque clásico

La habitación que tuvimos era amplia y contaba con unas vistas maravillosas al parque, lo cual hizo nuestra estancia muy agradable. El desayuno buffet era variado y delicioso, ¡no te puedes perder los pasteles! Sin embargo, la limpieza podría mejorar, ya que encontramos algunos detalles que no estaban a la altura de un hotel de su categoría.

El desayuno en el Marconi Restaurant fue un verdadero festín! Había tanto para elegir, desde quesos hasta una variedad de huevos que harían sentir orgulloso a cualquier chef. Además, la experiencia del spa fue tan relajante que me sentí como una mantequilla derritiéndose en el sol, con tratamientos personalizados que revitalizaron mi energía.

Ruidos ocasionales

La habitación tenía cristales en la moqueta, pero las vistas eran impresionantes.